Si hay algo que gusta a los más pequeños de la casa es jugar. Si no lo hacen, podríamos estar ante un problema en ellos. Jugar y divertirse es clave para que puedan formarse y adquirir diversos conocimientos. Jugando gozarán de una buena salud física y mental. En muchas ocasiones habrás escuchado que los niños tienen que aprender a jugar solos y no deja de ser una gran verdad, pero también tienes que tener en cuenta que no siempre es posible y que también hay situaciones en las que necesitan compañía y afecto. El problema es saber distinguir cuándo toca hacerlo y cuándo no. Lo que está claro es que, si tienes hijos, serán muchas las horas que pases corriendo detrás de ellos o satisfaciendo sus necesidades. Es importante que sepas que no se puede jugar sin pensar en lo que es beneficioso para el niño o la niña, así que toma buena nota de estos consejos para jugar con tus hijos.